Ya el día del partido empezó a llegar gran cantidad de gente de todas partes y diversas nacionalidades, en la ciudad se vivía un gran ambiente mundialista de hecho jugaba el país local y la afluencia de hinchas era interminable todas las plazas abarrotadas de gente lista para mirar el partido en pantallas gigantes y a medida que se acercaba la hora del partido se podía sentir con mayor intensidad la devoción que existe en Alemania por el Fútbol, por el contrario los tifosis Italianos en un numero muy reducido se sentían superados ampliamente pero no dejaban de confiar en su selección, que de hecho luego del partido y del triunfo fueron los que se apoderaron de las plazoletas para festejar el triunfo, mientras que la gran hinchada Alemana se retiraba muy triste y golpeada por el resultado, la fiesta que tenían preparada se había truncado y después de tantas horas de espera para e partido y de beber cerveza como verdaderos Alemanes algunos empezaron a protagonizar actos vandálicos pero que fueron inmediatamente reprimidos por la policía, en fin una experiencia inolvidable haber estado en la ciudad donde se jugo una de las semifinales y de haber vivido ese ambiente, no fue necesario estar en el estadio para sentir todo lo que tiene un mundial de por medio.

En si una verdadera fiesta que tuve la suerte de sentirla y puedo decir con mucho orgullo que estuve en el Mundial aunque sea un par de días pero fueron suficientes para sentir lo que sentí el estar hay como buen futbolero que soy, pero la historia continua porque ya al día siguiente debía salir con rumbo a París la cual pronto la contare e una próxima entrega
Paul Villavicencio
Finalidad Actuarial FINAC Cia. Ltda.
Mi sitio web
No hay comentarios.:
Publicar un comentario